Un vinilo decorativo romántico y delicado

Cuando queremos diferenciar una pared, vestirla, distinguirla, darle un toque peculiar, uno se pregunta: ¿Por qué? Si llegamos al final del laberinto comprendemos que probablemente lo que deseamos es dotarla de vida. Nos hemos resignado a sentirnos rodeados de cosas inanimadas pero, a su vez, les inyectamos dosis de nuestra propia vida a las cosas.

¿No es acaso, este mural de pareja bailando, un contagio de cultura más allá de las formas convencionales de esa trasposición?

Una pareja insinuada, desde el boceto, en sintonía, se gana un lugar interior, en el que llega a abrir la puerta de la “otra dimensión”, la dimensión del amor.

¿Hay algo más vivo que la danza de una pareja completa y completada, como el ying y el yang, como agua en el hueco de la mano, como imagen en el cristalino del ojo?

La armonía mutua, la reciprocidad perfecta, se exportan desde la idea madre, que no es solo la del diseñador, ni del inventor de la pictografía, la idea aparece o reaparece, pero está en el caldo de las posibilidades. Sin principio pero única.

Así es como se puede decir, de todas formas, que los diseños presentados aquí son originales y forman parte de una colección de dibujos para la decoración de espacios habitados, modernos, con ese grado de cultura y nivel que caracteriza a la nueva generación.

Es un vinilo decorativo muy bonito, un vinilo que se puede comprar en: Vinilo Decorativo pareja