Este vinilo es especial, algunas personas nunca se dejan vencer por la madurez y, aunque en cierta forma es necesaria para la vida, un poco de “juventud” a sus costumbres, un poco de entretenimiento a los espacios ayuda a que todo se vea más joven. Ese es quizá uno de los secretos que siempre ofrecen los vinilos de Chispum, son vinilos para mentes inquietas, esas que se niegan a envejecer.
Es una carretera con curvas, un camino sinuoso que lleva al hogar, al objetivo o quizá, a la aventura. Un camino siempre simboliza un cambio, el pasaje del tiempo, de futuro a pasado o al revés, lo bueno es que simboliza dinamismo por la sencilla razón que para recorrerlo se requiere movilidad y tiempo.
El vinilo está para la venta en Chispum, en su tamaño más pequeño cuesta 50 euros y está disponible en varios tamaños más. Por supuesto que queda genial en este ambiente blanquísimo de este dormitorio pero el vinilo da para muchos lugares más, depende de proponerte otras alternativas.
